La imagen del agente inmobiliario es de las características principales que tienen un impacto directo en clientes, colegas, jefes, amigos, familiares y todas aquellas personas con las que tenemos contacto de alguna manera, es decir, lo que proyecta se queda grabado sea positivo o negativo; y con imagen nos referimos a distintos ámbitos. Podemos definir la imagen pública como la percepción colectiva de alguien.

Todos, queramos o no tenemos una imagen pública que transmitimos; no sólo aplica a aquellos que se manejan en la esfera pública como políticos, influencers, cantantes o actrices. Aquí la pregunta realmente importante es, ¿Qué deseo comunicar? ¿Cuál es el objetivo que tengo con respecto a esa imagen? Todos jugamos distintos roles según el grupo social en el que nos movemos, la misma actitud puede ser bien o mal vista, de acuerdo con la situación. 

¿Cómo se compone la imagen del agente inmobiliario?Aunque la intención es centrarnos en la imagen del agente inmobiliario, es importante subrayar que esto puede aplicar a cualquier ámbito, lo esencial es determinar nuestra intención.  En primer lugar, la imagen física juega un papel fundamental, cómo me visto, los colores que suelo usar, en seguida la imagen personal es también determinante, mi complexión, estatura, corte de cabello, higiene, etc. De igual manera el lenguaje personal es vital, soy amable, serio o frío, cuál es la manera en qué me siento, qué gestos tengo. En otros casos, dónde se ubica mi oficina o casa o cuál es la decoración que utilizo.

Por otro lado, el uso de la palabra oral o escrita también proyecta mucho, sumado a esto, la imagen audiovisual, es decir, cuál es el contenido que comparto en redes sociales, desde publicaciones hasta fotos o videos que puedan ser sujetos a escrutinio o conversación en la opinión pública. 

Quiero mejorar mi imagen

Por lo tanto, podemos concluir entonces que la imagen del agente inmobiliario debe ser integral, lo que se debe buscar es ser coherente con lo que buscamos proyectar, al definirlo todo será más sencillo a la hora de elegir cómo vestirnos, hablar, etc. Recuerda que, mucho del éxito o el fracaso está relacionado con la manera en que nos perciben, siempre debes intentar estudiar al público al que te diriges. 

Evidentemente, también es necesario que esta forma de la que hablamos cuente con un fondo sólido, es decir, no basta con verme profesional, debo serlo, manejar información de forma sencilla, abordar temas de conversación diversos, entre otros.  Para saber más de este y otros temas, ingresa a nuestro blog y síguenos en redes sociales.