Un albacea es el representante legal de la persona que falleció, tiene el poder para realizar cualquier trámite. Este tipo de nombramientos se realizan en los procesos testamentarios o intestamentarios. Cuando una persona no realizó un testamento se puede considerar que sus propiedades inmobiliarias quedan intestadas, es decir que, no existe una voluntad testamentaria por parte del dueño fallecido y, por lo tanto, no se señalan los herederos.

Ante la pérdida de un ser querido sin testamento, hay distintos pasos que se deben seguir para llegar a un procedimiento sucesorio de manera ágil:

1. Llegar a un acuerdo con los poseedores de los derechos hereditarios, de esto dependerá que el proceso se desarrolle de manera sencilla, rápida y ágil o bien, sea largo y tortuoso.
2. En caso de no existir conflicto de interés, acercarse a un notario que pueda ayudarlos con la adjudicación de los bienes inmuebles. 
3. Se nombra un albacea
4. Éste hace un inventario para la adjudicación de los bienes 

Es vital resaltar que siempre será preferible llegar a un acuerdo en el que se reconozcan los derechos hereditarios de todos los involucrados para resolver de forma práctica la adjudicación, en caso de discordia, será necesario enfrentar un juicio que determine lo que corresponde a cada heredero, sin embargo, también se traduce en gastos y trámites legales.

¿Cómo se nombra un albacea?

Hay distintas formas de hacer el nombramiento, cuando existe un testamento el propietario de los inmuebles generalmente lo designa, cuando no es así, puede ser nombrado por aquellos que poseen derechos hereditarios, en la última instancia que no se logre un acuerdo entre los involucrados, será por una orden judicial. 

Obligaciones

En primer lugar, el albacea tiene la obligación de velar por la seguridad de los bienes heredados, los administra y valúa. Es responsable también de rendir cuentas de esto a los involucrados en el proceso y, por último, vigila el momento de la adjudicación de los inmuebles. El hecho de poseer este título, no se relaciona con contar con más poder, la tarea es la de ser un mediador y resolutor de conflictos. 

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